Nueva Barbie K (al mejor estilo Thatcher)

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Querida Cristina,

Llevo mucho tiempo sin escribirte, lo sé, pero ha sido imposible. No estuve de vacaciones y tenido constante conexión a Internet, sencillamente no me salía.

Tal vez es porque asocio directamente la verbalización con el entendimiento, y yo del mundo, ahorita, no entiendo nada. Desde los cacerolazos en Islandia hasta por qué el Consejo Nacional Electoral de Venezuela convoca a elecciones para la Reforma e inmediatamente cierra la posibilidad de inscripción y actualización del registro para nuevos votantes... nada de nada.

La cosa es que como no estoy muerta y tampoco estoy de parranda, hoy al leer el comentario de Clarín (responsables de la foto que acompaña a este post) sobre lo meticulosamente pensado que ha estado tu look en esta visita a Madrid, supe que, a pesar de mi mute generalizado, tenía que escribirte, porque ha llegado la hora, Cristina, ha llegado el momento de tener tu propia action figure: la Barbie K, el estilo presidencial Thatcher, pero con mejor figura.

¡Agarrate Margaret!

Creo que este es el tipo de oportunidades que no se deben dejar pasar, porque la conjunción de circunstancias que las generan suele durar pocos instantes. Por ejemplo, la 'chompita' con la que Evo Morales visitó por primera vez a los Reyes de España se popularizó de tal manera, que en Bolivia se fabricaron y vendieron chompas hasta que se agotaron las lanas con los colores de ese sweater cualquiera que Evo se llevó -según un reportaje de Gato Pardo- porque pensó que podía estar haciendo frío en España y no porque quisiera de una manera rebelde manifestarse en contra de los códigos y los protocolos de la etiqueta presidencial.

Cristina, es ahora o nunca. Pero eso sí, como te digo una cosa, te digo la otra. No sé qué tanto le agrade la idea a Néstor.


**Advertencia: la Mini Casa Rosada, los mini Manolo Blahnik, los minibolsos Louis Vuitton, la Barbie y su marido, se venden por separado.**